Estaba leyendo una noticia que puso mi querido Hipocrático en RegioBlogs acerca de que en Brasil en las pasadas elecciones utilizaron urnas electrónicas para emitir los votos, por lo que en promedio a cada brasileño le tomó unos 10 segundos votar.
Desde el punto de vista de un votante que lo único que quiere hacer es cumplir con el compromiso, pues mientras menos se tarde uno mejor. Pero el principal problema que yo veo con es que este tipo de sistemas electrónicos tienen muchas deficiencias, y no me refiero a pequeños "bugs" o errores de programación, sino grandes problemas de diseño y de cómo protegen el voto del ciudadano.
Básicamente, una urna electrónica es una pantalla donde tú llegas, seleccionas al candidato que quieres en la pantalla y le das "finalizar" al proceso. El sistema incrementa el contador de votos para el candidato, y al final esos conteos se unen para llegar a un conteo final. Opcionalmente, el sistema imprime un "comprobante" que te dice que votaste, y por quien. Pero aquí es donde empiezan los problemas.
¿Como sabemos que la urna no fue precargada con votos para uno u otro candidato? En las pasadas elecciones en México, teníamos a cuatro ciudadanos asignados por el IFE por cada casilla, mas otros cuantos observadores, armando las urnas en la mañana, y claramente pudieron observar que las urnas estuvieran vacías antes de empezar. No existe una manera confiable de que hagan lo mismo con una urna electrónica.
También contamos en México con una credencial electoral única, la cual nos identifica a la hora de votar (y es compaginada con el registro electoral del IFE para validar que somos quienes decimos que somos y que estamos donde decimos que estamos), y que es marcada una ves que hayamos votado. Así mismo, los representantes del IFE se aseguran que solo tengamos una boleta por puesto a elegir, para no votar de mas (o de menos). El artículo de Brasil no menciona como validan que los brasileños solo voten una vez, pero cuando tienes un sistema que te permite votar en 10 segundos, tiene que haber una manera de que una persona ante la urna electrónica no pueda votar 6 veces en un minuto. Esto implica usualmente que te tienes que identificar ante la misma Terminal quien eres, por lo que se presenta otro problema. Tu voto puede, en un momento dado, dejar de ser anónimo. Aún cuando te aseguren que lo es, como no tienes acceso al código de la urna electrónica, o del sistema en general, no lo sabes. En países donde el anonimato es necesario por cuestiones de presión política por parte de sindicatos, etc., el voto secreto es una necesidad.
Por último, en caso de que haya alguna evidencia de irregularidades en el conteo inicial de los votos, se puede realizar un recuento conforme a lo establecido en la ley. En el caso de las urnas electrónicas, esto sería casi imposible.
Las urnas electrónicas han recibido muchas quejas en Estados Unidos debido a su falta de seguridad, su código cerrado, que no se tengan contempladas maneras de auditar la votación, etc. Yo la verdad no cambiaría mis 15 minutos (lo que me tardé en votar el 2 de Julio) por 10 segundos, porque se que nuestro sistema electoral tiene 20 años de madurez y ha sido pensado para evitar cualquier tipo de fraude. El sistema electrónico no solo no ha sido comprobado, sino que ya desde ahora se le están detectando fallas graves que merman la confianza de estos aparatos.